Me parece una gran idea y merece la pena que sea llevada a su fin.
Hace unos 3-4 meses recibí un email informando de esta nueva forma de ayuda a los más necesitados; pensé: como entre a una farmacia y diga "deme pastillas para el dolor ajeno", fijo que me tratan de loca!.
Así que desestimé la idea pensando que sería uno de esos bulos que corren por la red y en estos días caseros, viendo la tele más horas de las habituales, me encuentro de nuevo con el anuncio.
Para quién todavía no sepa sobre la iniciativa, se trata de lo siguiente:
Vas a la farmacia, pides estas pastillas contra el dolor ajeno, pagas un euro por los seis caramelos de mentol-eucalipto que contiene la caja y los ingresos netos de la de la campaña se destinan, íntegros según la web de Médicos sin fornteras, a tratar enfermedades tan olvidadas, para nosotros, como la malaria, tuberculosis, sida pediátrico,...
Así que ya sabéis, con este fármaco podéis automedicaros todo lo que queráis y recetarlo todo los que os acordéis. Mis invitados de este día de reyes se han encontrado con una cajita en la mesa.
Sandra
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2 comentarios:
Pues yo también pensaba que era una cadena absurda y no le hice ni caso.
Pues me compraré una caja, con los tiempos que corren, mejor que nos ayudemos un poco entre todos.
Pues sí LR, puestos a gastarse unos eurillos en "chuches", más vale en éstas.
Saludoooooooos
Sandra
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